Las vallisoletanas se imponen al Costa del Sol Málaga en el último minuto de un enorme partido (33-31)
Aula Valladolid.
Una última defensa para el recuerdo le dio la victoria al Caja Rural Aula Valladolid ante el Costa del Sol Málaga (33-31). Las malagueñas atacaban para empatar (32-31) a menos de un minuto para el final y cada una de las jugadoras blanquiazules se dejó el alma para arañar ese balón, esa pelota que permitiera sumar la victoria. Negaron el gol a las malagueñas y Claudia Moreno marcó sobre las bocina para que Huerta del Rey pudiera celebrar un enorme triunfo.
Comenzó el partido el Caja Rural Aula Valladolid con una defensa muy agresiva y una vigilancia especial sobre Silvia Arderíus que le sirvió para robar y hacer lo que más le gusta: correr. Tres robos y tras primeras oleadas permitieron que la blanquiazules abrieran una pequeña brecha en el marcador (6-3, min.7) Pero enfrente estaba el colíder de la Liga Guerreras Iberdrola, que tiró de calidad individual para empatar el partido (6-6, min . 11).
Sobrevivieron las blanquiazules al buen momento malagueño y a la exclusión de Jimena Laguna para llegar al ecuador de la primera mitad con empate en el marcador (9-9). Los dos equipos mostraban su mejor cara, pero las de Peñas se mostraban más contundentes en defensa y volvieron a abrir una pequeña brecha el el marcador (14-11, min.21). Así que Suso Gallardo pidió tiempo muerto para frenar el despegue vallisoletano y aclarar las ideas de sus jugadoras. Pero la segunda unidad de las locales iba a sacar las garras para poner la máxima ventaja en el marcador (17-13, min.27). Eso sí, al descanso las malagueñas consiguieron recortar un gol para irse solo tres abajo (17-14).
Una falta en ataque y una posterior exclusión de O’Mullony por la protesta posterior a la jugada hizo que la segunda parte no pudiera comenzar peor para las locales. Costa del Sol Málaga aprovechó para hacer un parcial de 0-3 y empatar el partido (17-17, min. 32). El partido volvía a empezar. Y lo hizo tan bien que los ataques empezaron a superar a las defensas con grandes gotas de calidad de las jugadoras de uno y otro lado. Ni siquiera las exclusiones conseguían desnivelar el partido. Además, el cansancio empezaba a hacer mella en la pista, algo que aprovechó la incombustible Jimena Laguna para abrir otra pequeña brecha de dos goles (27-25, min. 48).
Pero de nuevo remontó Málaga para entrar en los últimos cuatro minutos con empate en el marcador (29-29). Ahí llegó un carrusel de goles, las enormes paradas de Alicia, los robos, las pérdidas y ese último minuto en que el Caja Rural Aula Valladolid se dejó el alma por mucho más que dos puntos.